Semana 1 Miércoles

“Debemos trabajar en las obras de aquel que me envió, mientras es de día; llega la noche, cuando nadie puede trabajar. Mientras estoy en el mundo, soy la luz del mundo.”. (Juan, 9, 4-5).

Mañana

Gracias Padre por esta mañana que bosteza y me invita a alabarte con mi tarea. Que pueda encontrarme con mis compañeros de trabajo, entregando mis ganas, para construir un mundo más justo. Que las tensiones no me deshumanicen y generen otras tensiones.

Quiero vivir este día en forma audaz y orgánica, integrando en mi interior mi inteligencia, mi voluntad y mis afectos. Sacame de la comodidad de mis sillones de cuero.

Abrí mi espíritu para que descubra la inmensidad de posibilidades que existen en la manera de forjar mi tarea, sabiendo que la forma como la realizo, está más relacionada con mi propia interpretación del mundo, que con una única realidad posible. Que integre y no divida.

Llegá hasta el fondo de mi alma. Saná mi inconsciente, doblegá mis demonios que nublan mi apertura, vinculación y transparencia hacia quienes trabajan a mi lado. 

Medio día

Te alabo Jesús en esta pausa. Quiero vivir y trabajar en tu presencia.

Hacete presente en mi trabajo en medio de la incomprensión y la frialdad de muchas de las exigencias de este día. 

Bendecí a cada una de las personas que hoy se contactan conmigo. Que los  e-mails que reciba, requiriéndome tareas que me estresan, no me alejen de quienes están detrás de ellos … ni de mí mismo. 

Que te encuentre en las urgencias 
y vuelva a la paz, 
que te busque en lo pequeño
y encuentre tu grandeza, 
que sienta tu mano sosteniéndome
y pueda levantar a quienes se caen.

Despojame de tantas cosas que llevo adheridas, que limitan mi entrega y hacen que el peso del día sea alto. Atame a la fuerza de mis ideales.

Llename de asombro para vivir despierto, descubriendo nuevas posibilidades y caminos para crecer en paz y alegría.

Tarde

Te doy gracias Padre por la abundancia recibida en este día de trabajo y por quienes compartieron su saber, sus esfuerzos y sus manos, siendo solidarios y generosos en la entrega.  Gracias Padre. 

Dame lucidez para seguir haciendo mi tarea, compartiendo el corazón, siendo audaz en la entrega y alejando mis temores para enfrentar los desafíos. Que pueda encontrarte en los competidores.

Fortalecé mi autoestima, a pesar de las horas fuertes y frías que tuve en este día. 

Te pido fuerzas para superar mi pasividad y de todos los que no nos comprometemos lo suficiente en nuestro trabajo para limitar la contaminación ambiental y la generación de desechos no reciclables. ¿Qué mundo vamos a entregar a nuestros hijos?

Revelame Padre el sentido de tanto dolor que padecen  muchas personas que trabajan junto a mí.  

Cuántas cruces y misterios …   

No comprendo muchas veces tus caminos …

Dame auroras en mis noches y calma en las tormentas.

Te entrego todo. 

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