CONOCÉ SOBRE NOSOTROS
CIEES INTERNACIONAL

La Comunidad Internacional de Empresarios y Ejecutivos Schoenstattianos (CIEES) es una red que busca promover la pedagogía y la espiritualidad del Padre José Kentenich en el mundo del trabajo y la empresa.
Actualmente está presente en Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, España, Estados Unidos, México, Perú y Paraguay.




Paises miembros

Comisión Directiva


FRANCISCO CONTARDO
Presidente
Chile

Bernardo Borja
Dirección Ejecutiva
Ecuador

Jessica Salas
dirección de comunidades
Costa Rica

Ernesto Amador
Dirección Financiera
ecuador

Selene Chávez
dirección de Secretaria General
méxico

Antonio Rueda
dirección de formación
ecuador

MAURICIO DOMÍNGUEZ
Dirección de comunicación
Paraguay

Nelly Diaz
Dirección de Espiritualidad
Paraguay
presidente por comunidad






















Misión
Desarrollar y coordinar líderes que inspiren y evangelicen con su ejemplo, promoviendo y aplicando la pedagogía del Padre José Kentenich, fundador de Schoenstatt, en el mundo del trabajo.
VISIÓN
Ser una comunidad internacional (abierta/inspiradora) que viva y transmita en el mundo del trabajo la cultura de alianza y la pedagogía kentenijiana, para la transformación del hombre nuevo en un nuevo orden social.
Los principios que orientan a CIEES

El CIEES es una comunidad libre y abierta formada principalmente por empresarios y ejecutivos relacionados con el Movimiento de Schoenstatt que buscan contribuir, de acuerdo a su carácter laical, como apóstoles e instrumentos del Señor al interior de las empresas y organizaciones en las que trabajan, para la construcción de un orden social según al querer de Dios, manifestado en la ley natural e iluminado por el Evangelio.
Por lo anterior, el CIEES, hace suyo en forma especial el documento “La Vocación del líder empresarial”, como principal documento que resume la Doctrina Social de la Iglesia de manera actual y fácilmente comprensible.
En este contexto, el CIEES quiere trabajar y unir sus esfuerzos a todos, católicos, creyentes y no creyentes, que luchan por una sociedad justa y fraterna, que velan por la dignidad del hombre en el mundo del trabajo.
El CIEES quiere, además, contribuir a la forjación de un nuevo orden cristiano de la sociedad, aportando el carisma que el Dios de la historia nos entregó a través del P. Kentenich, fundador de Schoenstatt. Este aporte kentenijiano lo podemos resumir en los siguientes puntos:
- El empresario y el ejecutivo es visto como un cooperador de Dios en su obra creadora y redentora. La brújula que los guía es la divina Providencia de acuerdo a las voces del tiempo, del alma y del ser.
- El fundador de Schoenstatt nos entrega una nueva visión de la autoridad, en su ser, actitud y actuar. Se trata de una autoridad que se concibe marcadamente como servicio. En este sentido se destacan la “ley de gobierno”, la ley “de construcción” y la “ley de polaridades”, según las cuales se orienta el ejercicio de la autoridad
- Caracteriza nuestro aporte Kentenijiano la preocupación central que muestra en el P. Kentenich por cultivar el “organismo de vinculaciones” o relaciones interpersonales. Da especial importancia a la relación armónica de la familia y el trabajo (a la familia del empresario o ejecutivo: la familia como taller de las actitudes sociales básicas); a la preocupación por las familias de los miembros de la empresa y al cultivo de los vínculos al interior del lugar de trabajo, a los proveedores y clientes.
Oración CIEES
Señor Jesús, Tú me has elegido para ser instrumento y colaborador en tu obra creadora y redentora en el mundo del trabajo y de la empresa.
Quiero seguir tus pasos de Buen Pastor.
Ayúdame por eso, a ser imagen y presencia tuya, para quienes trabajamos juntos en la obra que me has encomendado.
Quiero servir con generosidad, humildad y responsabilidad. Confórtame, Señor, en mi debilidad.
Perdona mis faltas y haz que dé los frutos que Tú esperas de mí.
En todo quiero buscar la voluntad del Padre Dios, tal como Tú lo hiciste, para que surja una nueva sociedad marcada con el sello del Evangelio.
Madre y Reina mía, cuida Tú de mí y de los míos. Recibe en este día mi contribución al capital de gracias en tu santuario.
Acógeme, transfórmame y envíame.
Oh Señora mía, oh Madre mía…