Sostenibilidad desde una óptica
El disertante Pablo Narvaez presentó en el Congreso CIEES Chile 2021 una agenda ambiciosa sobre la sostenibilidad desde una perspectiva técnica y espiritual. El objetivo principal de su presentación fue movilizar a los asistentes a ser protagonistas en el mundo empresarial y hacerse cargo de los desafíos que enfrenta la humanidad. El cambio climático, los efectos ambientales y sociales están generando preguntas sobre cómo podemos contribuir a hacer un mundo mejor. Según Narvaez, la sostenibilidad es una herramienta que permite buscar formas de hacerlo de manera más eficiente y responsable. El informe Brunda de 1987 de las Naciones Unidas fue el primer informe que alertó sobre los impactos ambientales que estaba generando el desarrollo económico del planeta y el costo que esto podía tener. Desde entonces, se ha adoptado el concepto de sostenibilidad, que se resume en satisfacer las necesidades del presente sin comprometer las necesidades y posibilidades de las generaciones futuras. Las empresas tienen la responsabilidad de gestionarse bajo este concepto y reportar sus resultados desde una mirada triple que incluya no solo el desempeño económico, sino también el social y el ambiental. El cambio de cultura generacional, la democratización de la información y la pérdida de credibilidad de las instituciones son algunas de las causas que llevaron a adoptar este concepto de sostenibilidad. El mundo enfrenta una encrucijada en la que es necesario administrar los recursos del planeta de manera más creativa y reflexiva, y hacerse cargo de los problemas sociales y ambientales que enfrenta la humanidad. La sostenibilidad se presenta como una herramienta clave para abordar estos desafíos.
En resumen, Pablo discute sobre varias tendencias que están afectando el mundo y que deben ser consideradas por empresas y líderes empresariales. Estas tendencias incluyen la resaca del sobreconsumo, la necesidad de eficiencias en la producción de alimentos, la inequidad, la modernización y la robotización del trabajo, la cuarta revolución industrial, la pérdida de empatía, el aumento de la edad promedio mundial, la feminización de la cultura, la vuelta al origen y al handmade, el cambio climático, los derechos humanos, la inversión responsable, la economía circular, la diversidad y la cadena de valor. Los líderes empresariales deben estar atentos a estas tendencias y tomar decisiones éticas y responsables para abordarlas en sus empresas e instituciones.
En conclusión, la actual crisis que estamos viviendo ha sido impulsada por una mayor demanda de representatividad y empoderamiento ciudadano, así como la facilidad para convocar acciones colectivas a través de las redes sociales. Además, estamos viendo tendencias como la resaca del sobreconsumo, la necesidad de eficiencia en la producción de alimentos y energía, la inequidad, la automatización del trabajo y la pregunta ética del transhumanismo. También hay una mayor preocupación por la cadena de valor y la inversión responsable, así como una mayor valoración del trabajo hecho a mano y la economía circular. Como líderes empresariales, debemos estar atentos a estas tendencias y tomar decisiones con anticipación para prepararnos para el futuro y velar por los derechos humanos, la diversidad y la transparencia en nuestras empresas.